martes, 17 de marzo de 2020

El palacio Moika o Yusúpov (sobre el río Moika) fue la principal residencia en San Petersburgo _ Rusia. El palacio fue construido hacia 1770 por el arquitecto francés Jean-Baptiste Vallin de la Mothe. A lo largo de los años diversos arquitectos de renombre le hicieron ampliaciones y modificaciones al palacio, siendo conocido por su mezcla de estilos arquitectónicos.

  

A. Mijáilov reconstruyó el edificio en la década de 1830 cuando los Yusúpov lo adquirieron. Es en esta época que se le dio la apariencia moderna que se observa en la actualidad.
Desde 1830 hasta 1917, el palacio perteneció a la casa de los Yusúpov, una familia de nobles rusos con una riqueza inmensa, famosos por su filantropía y colecciones de arte. 



Durante la época de la Rusia Imperial, el palacio era denominado el Palacio Yusúpov.
Su decoración interior y lujos no le iban a la zaga de lo que se observaba por esa época en los palacios reales. El palacio alojaba más de 40 000 obras de arte, incluyendo obras de Rembrandt, joyas y esculturas. La colección Yusúpov fue nacionalizada y trasladada al Hermitage y otros museos.



El palacio lleva una leyenda negra y oscura en sus entrañas a pesar de sus bellas y paredes. El príncipe Félix Félixovich Yusúpov, se convirtió en un personaje célebre por su participación en el asesinato de Rasputin en el año 1916, junto con el diputado Vladímir Purishkévich, el gran duque Dmitri Pávlovich Románov y otros conspiradores.




A pesar de su bien avenido matrimonio con la princesa Irina, algunas versiones señalaban que Yusúpov probablemente hubiera sido un homosexual (pero no existen pruebas sobre aquello) al igual que el gran duque Dmitri.

Cabe recordar, que durante toda su vida, el monje Rasputin, siempre intentaba seducir tanto a mujeres como a hombres también, pues tenía múltiples contactos con este círculo de aristócratas.



En diciembre del 1916 el monje intentó seducir al príncipe. Ofendido el príncipe por ello e influido también por el diputado de la Duma Vladímir Purishkévich, que temía los peligros que la nefasta influencia del monje tenía en el gobierno del zar Nicolás II (se rumoreaba la posibilidad de una paz por separado con Alemania), se decidió planear el asesinato en su palacio.

Existen ciertas diferencias de opinión sobre los eventos en los que muere Rasputin. De acuerdo a los Yusúpov, en la noche del 16 de diciembre de 1916, Félix Yusúpov junto con el Gran Duque Dmitri Pávlovich de la Casa de Románov, invitaron a Grigori Rasputin al palacio Moika. Aparentemente le sirven a Rasputin tortas y vino tinto contaminado con cianuro, supuestamente en cantidad suficiente para matar a cinco hombres. 



Preocupado porque no se observaban efectos del veneno en Rasputin, Yusúpov saca una pistola y le dispara a Rasputin en la espalda. Pensando que Rasputin había muerto, se retiran del recinto. Yusúpov regresa al cabo de un rato a la sala y descubre que Rasputin sigue vivo. Félix y los otros conspiradores le disparan a Rasputin, desde muy corta distancia tres veces más, pero Rasputin todavía continuaba tratando de incorporarse y escapar.


Desesperados le pegan varias veces a Rasputin con una barra de hierro en la cabeza, lo envuelven en una sábana, lo sacan del palacio y lo arrojan al río Moika. Supuestamente la autopsia indicó que ni el veneno, ni las múltiples heridas de bala, ni los golpes fueron la causa de su muerte, sino que murió de hipotermia. Gran parte del relato de Yusúpov es considerado improbable.


En el siglo XIX, el palacio de los Yusupov se consideraba como uno de los palacios más elegantes de Europa. Fue construido en el siglo XVIII, cambiaba sus dueños y por fin fue comprado por la familia de los Yusupov.







No hay comentarios:

Publicar un comentario