El caminante sobre el mar de nubes, obra Caspar David Friedrich de 1818, con unas dimensiones de 74,8 cm × 94,8 cm, Kunsthalle de Hamburgo, Hamburgo, _ Alemania
Se trata de un pintor paisajista del romanticismo alemán del Siglo XIX, generalmente considerado el artista alemán más importante de su generación. Es conocido por sus paisajes alegóricos de su periodo medio que muestra figuras contemplativas opuestas a cielos nocturnos, nieblas matinales, árboles estériles o ruinas góticas.
El caminante sobre el mar de nubes no trata sobre un tipo que sube a una montaña en una mañana libre de domingo. Es algo más. La primera prueba es el propio personaje que observamos. Algunos lo han identificado con el propio Friedrich, otros han querido a ver a algún amigo suyo. Friedrich quiere que asumamos su rol, de ahí que lo sitúe en el centro de la obra. Parece casi como que somos nosotros quienes nos asomamos al acantilado.
El caminante sobre el mar de nubes, obra Caspar David Friedrich |
Otro indicativo es el paisaje en sí. Sabemos que se trata de un emplazamiento suizo, donde el propio autor estuvo refugiado por la amenaza de las guerras napoleonicas. El monte de la izquierda es el Rosenberg, y la atalaya de la derecha es el Zirkelstein. Aunque la disposición de éstos es más o menos verosímil, Friedrich los usa como meros pretextos. Es decir, no le interesa pintar un paisaje de la baja Sajonia, se vale de este para transmitirnos un significado.
Finalmente el estilo de Friedrich es sobrio, de índole realista y preciso. A destacar es el marcado contraste de tonos oscuros y claros y, como comente antes, la composición, con la figura dominando en el centro, tapando el punto de fuga. Parece que parten de él las dos colinas a los lados: truco que emplea el pintor para captar aún más la atención del espectador hacia el personaje.
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