El pintor holandés Kenne Grégoire,

El pintor holandés Kenne Grégoire, nació en 1951 Teteringen _ Países Bajos, estudió en la Academia Estatal de Bellas Artes. Graduándose en el año 1973, en el mismo año ganó el Premio de Plata de Roma. A invitación del Ministerio de Cultura italiano en 1976 realizó un viaje de estudios a Italia.

Destacando por su pericia técnica (sobre todo en la captación de las texturas), podemos ver en su obra una continuación de la tradición de su paisanos Vermeer (en sus obras más luminosas) o Bruegel y El Bosco (en las más oscuras).

Kenne Grégoire pinta en un estilo realista. Generalmente utiliza una técnica que se llama grisalla sobre el cual los colores son aplicados como esmaltes y la pintura acrílica. La grisalla es una técnica pictórica basada en una pintura monocroma que produce la sensación de ser un relieve escultórico.

Fue puesta de moda por diversos pintores en el siglo XIV, quienes la emplearon en bocetos y dibujos preparatorios para lograr un efecto de relieve mediante un claroscuro muy matizado, haciendo diversas gradaciones de un solo color, generalmente gris o amarillo oscuro, buscando un color lo más cercano posible al de la piedra.

Como regla general de sus obras son realmente hermosos y magníficos. Lo que busca es ampliar la paleta de colores, tiene sentido mezclar diferentes colores, las mezclas de colores pueden terminar rápidamente en un gris-marrón poco atractivo e indefinible. Es por eso que es importante en la pintura acrílica tener mucho cuidado al mezclar colores. Al mezclar pinturas acrílicas, se debe comenzar con el color más claro e ir agregando gradualmente el color más oscuro hasta obtener el color o tono deseado.

Los temas son diversos. La serie con el tema de la Comedia dell'arte se originó en los últimos años. Personas vestida teatralmente con una apariencia que traicionan la soledad, desesperación y anhelo que sus expresiones reflejan. Su estado de ánimo está en agudo contraste con la ropa festiva.

En sus trabajos vemos retratos, desnudos, paisajes, interiores y excelentes naturalezas muertas. En todos ellos mezcla lo bello y lo grotesco como una unidad. su mayor desafío es crear la ilusión o trasmitir la sensación de que los objetos en el lienzo son realmente tridimensionales.