miércoles, 30 de julio de 2025

Claude Monet en Venecia

Claude Monet (1840–1926) y su esposa Alice Hoschedé (1844–1911) visitaron Venecia en octubre de 1908, un viaje que inspiró al artista a pintar algunas de sus obras más etéreas y luminosas. Esta fue la única vez que Monet visitó Venecia, y se alojaron en el Palazzo Barbaro, una residencia señorial frecuentada por artistas y escritores.






Durante esta estadía, Monet quedó profundamente cautivado por la luz, el agua y la arquitectura veneciana. Aunque normalmente no pintaba escenas urbanas, hizo una excepción en Venecia debido a la atmósfera única de la ciudad. La Plaza de San Marcos (Piazza San Marco) fue uno de los temas que abordó en varias de sus pinturas, con su cúpula bizantina, la Basílica de San Marcos, y el reflejo del agua desempeñando un papel central.


Su esposa Alice, quien lo acompañó en este viaje, estaba ya bastante enferma; fallecería solo tres años después. Monet escribió sobre ella y su enfermedad en su correspondencia, y aunque el viaje a Venecia tenía un componente artístico, también fue visto como una forma de buscar bienestar y alivio para ambos.




Monet realizó unos 37 lienzos basados en lo que vio en Venecia, aunque muchos de ellos los completó posteriormente en su estudio en Giverny. Entre las obras más conocidas de esta serie destacan:

Estas pinturas no son representaciones exactas de los lugares, sino interpretaciones muy personales en las que predominan la luz, el color y el movimiento.



Palazzo Contarini,(Le Palais Contarini)

Una vista frontal cortada del palacio reflejado en el agua, reducida por Monet a una superficie ornamental. Captura el contraste entre la arquitectura y las ondulantes aguas con matices azules y verdes. Pinta la fachada desde el agua con detalles mínimos y una atmósfera suave e impresionista .Una vista frontal cortada del palacio reflejado en el agua, reducida por Monet a una superficie ornamental. Captura el contraste entre la arquitectura y las ondulantes aguas con matices azules y verdes. Pinta la fachada desde el agua con detalles mínimos y una atmósfera suave e impresionista .



Le Grand Canal (La Place Saint-Marc)

Parte de una serie de seis lienzos desde el Palazzo Barbaro, centrada en la iglesia de Santa María della Salute y los palos de amarre (bricole) que emergen del agua. Monet utilizó pinceladas sueltas y una paleta de verdes, azules, rosas y púrpuras para capturar los efectos cambiantes de la luz en el agua. Estas pinturas no son representaciones exactas de los lugares, sino interpretaciones muy personales en las que predominan la luz, el color y el movimiento.



Piazza San Marco en Venecia,(La Place Saint‑Marc)

Monet también pintó al menos una obra de la Plaza de San Marcos durante esa visita. En ella, transformó el célebre espacio urbano mediante su enfoque impresionista, enfocándose en la luz, los reflejos y los contornos arquitectónicos más que en un registro fotográfico exacto .



Bibliografía : El Poder del Arte