Este sitio emplea cookies de Google para prestar sus servicios y para personalizar anuncios. Si utilizas este sitio web, se sobreentiende que aceptas el uso de cookies.
EntendidoMás información
"Dama en el baño", obra de François Clouet del año 1560 y con unas dimensiones de 92 x 81 cm. Actualmente se encuentra en National Gallery de Washington _ Estados Unidos.
Hijo de Jean Clouet, pintor de origen flamenco activo en Francia. La formación artística de François estuvo a cargo de su padre, de quien heredó el seudónimo «Janet». En 1540 le sustituyó como pintor oficial de la corte de Francisco I.
Tras la muerte del monarca continuó trabajando para la casa real de Valois, para la que pintó y dibujó principalmente retratos; sus dibujos fueron muy apreciados por Catalina de Medici, que coleccionaba en álbumes este tipo de imágenes.
En la década 1550-1560 aparecen toda una serie de retratos mitológicos, donde en una especie de juego preciosista y sofisticado, no exento de un frío e intelectualizado erotismo, las damas de la corte se convierten en protagonistas de historias pretendidamente mitológicas.
Son frecuentes escenas de toilette o baño, en las que los presupuestos manieristas de la Escuela eximen del menor atisbo de cotidianeidad, siendo absolutamente irreales y artificiosas con un acentuado detallismo dibujístico.
Entre su obra de carácter mitológico se le atribuyen con seguridad una Diana conservada en el Louvre, "El Baño de Susana" de Rouen, "La Diana de Poitiers", de sensualidad fría y muy refinada, que fue ampliamente copiada en provincias, en las que muestra una directa influencia del manierismo cultivado por la Escuela de Fontainebleau y "La carta amorosa" en el Museo Nacional Thyssen-Bornemisza.
"La carta amorosa" en Museo Nacional Thyssen-Bornemisza.
La Casa Vicens es un edificio modernista situado en Barcelona, obra de Antoni Gaudí, fue el primer proyecto de importancia del arquitecto tras su licenciatura como arquitecto en el año 1878.
Esta obra pertenece a la etapa orientalista de Gaudí (1883-1888), periodo en que el arquitecto realiza una serie de obras de marcado gusto oriental, inspiradas en el arte del Próximo y Lejano Oriente como India, Persia y Japón.
Un joven de 30 años, casi recién graduado de arquitecto, peleando por mantenerse en pie, anhelando encontrar un trabajo serio. Hasta ese momento sólo ha recibido un encargo de pago, la realización de unas enormes y hermosas farolas para la Plaza Real y la Plaza del Palau.
La casa Vicens, proyectada por Antoni Gaudí, por fin fue construida entre los años 1883 y1885 como casa de veraneo en Gràcia para el corredor de cambio y bolsa ManelVicens i Montaner. Es el primer intento de Gaudí para encontrar un estilo nuevo y huir del historicismo y el eclecticismo arquitectónicos imperantes.
En la casa Vicens, Gaudí anticipa de una manera puramente intuitiva toda una serie de categorías formales y constructivas que contribuirán a preparar la eclosión del Modernism. La casa consta de planta semisótano, planta baja (planta noble), planta primera (dormitorios), planta segunda (buhardilla) y cubierta (azotea).
Las fachadas se caracterizan por su modulación mediante piezas cerámicas cuadradas de 15x15 cm, definiendo así una arquitectura de ángulos rectos. En la parte inferior estos elementos aparecen dispuestos en hiladas horizontales, combinados con tramos de mampostería carejat.
Los techos de madera adornados con árboles cargados de flores o frutas, las aves volando por las paredes y techos, la multitud de colores tierra y fuego, es como un viaje al lejano oriente.
En el interior destacan los techos de vigas de madera policromada, adornados con temas florales de papier mâché; los muros tienen esgrafiados, (Esgrafiado es una técnica ornamental arquitectónica utilizada para la decoración en el enlucido y revestimiento de muros, tanto en el exterior como en el interior de edificios) de motivos vegetales, así como pinturas obra de Josep Torrescassana.
Mientras que en la sala conocida como el fumador emula con sus techos de yeso al famoso edificio del Generalife en la Alhambra de Granada, ( El Generalife de Granada era una villa rústica o huerta real, y es la única muestra que queda para hacernos una idea aproximada de cómo eran aquellas bellas mansiones rodeadas de jardines en los que el espíritu árabe se dejaba llevar por su instinto poético y sensual).
Esta es una de las pocas construcciones en las que Gaudí deja que predominen las líneas rectas, sin embargo hace amplio uso de las curvas, sobretodo en la decoración, al utilizar el hierro y en algunas piezas del mobiliarios. Cabe destacar que hasta los muebles fueron diseñados por el joven artistas, cosa que más delante pasaría a ser común cuando le encargaran una residencia privada.
La Casa Vicens, que se suma a la Ruta Gaudí, será el último y octavo edificio de Barcelona catalogado como Patrimonio Mundial de la Unesco que se abrió al público. La primera casa de Gaudí se suma a la exclusiva lista de la Sagrada Familia, la Casa Batlló, La Pedrera, el Park Güell, el Palau Güell, el Palau de la Música y el Hospital de Sant Pau.
Para Gaudí supuso el primer edificio en Barcelona y ya dejó muestras de su talento. “Casa Vicens se puede considerar la obra-manifiesto de Antoni Gaudí, hace bandera de una libertad de estilo inusitada en su época de construcción, evidencia la evolución creativa posterior del arquitecto y, de cara afuera, anticipa otros movimientos coetáneos de la vanguardia europea de finales del siglo XIX”´.
Bibliografia : https://sites.google.com
https://www.lavanguardia.com
El gran Gaudí. Sabadell: Ausa Arquitectura de Gaudí, Alberto Estévez
Autoretrrato de Judith Leysterc, (1609 - 1660) del año 1630 y con unas dimensiones de 74 x 65. Actualmente se encuentra National Gallery of Art Washington _ Estados Unidos.
Con esta obra consiguió ser reconocida en el Gremio de pintores de Jaarlem. Solo dos mujeres figuraron en el gremio de pintores de San Lucas de Haarlem durante una etapa importante en el periodo en el que destacaron Frans Hals, Rembrandt y más tarde Vermeer Una de ellas fué Juddith Leyster, dedicada a la pintura como oficio desde los quince años y tras la quiebra de la hostería que regentaba su padre, a los 18 años era reconocida como pintora.
El autorretrato de Leyster se ha especulado con que fuese su pieza de presentación para el gremio. Este trabajo marca un cambio histórico con el abandono de la rigidez de los autorretratos femeninos a favor de una pose más relajada y dinámica.
Su actitud es muy relajada según los estándares de cualquier retrato holandés lleva los ropajes, cómo en aquella época se solían retratar con trajes y complementos elegantes, mostrando estatus y dignidad para su profesión. La mayoría de las obras fechadas de Leyster son de entre 1629 y 1635, antes de casarse y tener hijos.
Judith Leyster realizó retratos, bodegones y desarrolló también la pintura de género, que se entiende como la representación realista de escenas de la vida cotidiana en ámbitos como la familia, la calle, las fiestas, las tabernas y los paseos campestres, temas de gran demanda entre los miembros de la burguesía holandesa.
Leyster fue particularmente innovadora en sus escenas de género domésticas. Estas son escenas íntimas de mujeres en el hogar, a menudo con velas o lámparas, evocando el punto de vista femenino.
Las pinturas de Judith muestran la influencia de Frans Hals y su hermano Dirck. No se sabe bien cuál fue la relación profesional que tuvo la pintora con Frans Hals, pero se supone que pudo ser su alumna o una amiga con cierto grado de amistad. Una Judith Jans figura como testigo del bautismo de María, la hija de Frans Hals, lo que podría establecer algún vínculo.
Un hecho fuera de lo común en la época es que esta pintora tenía su propio taller, donde también se dedicó a la enseñanza y tuvo alumnos varones. Entre ellos figuran Willem Wouters, Hendrick Jacobsz y David de Burrij, aunque no hay evidencias de trabajos que ellos hayan producido.
Tuvo cinco hijos y sus trabajos posteriores conocidos se limitan a algunas ilustraciones para un libro sobre tulipanes y un retrato fechado en 1652. El talento de su marido, Jan Miense Molenaer, se dice que era inferior al de ella, pero su producción fué mayor. Probablemente ella le ayudó en sus trabajos, mientras se dedicaba a la crianza de sus cinco hijios y la administración de sus propiedade
Murió en 1660 y aunque fué muy apreciada por sus colegas, después de su muerte cayó en el olvido y nunca fué mencionada en fuentes posteriores.
Construido en el siglo XVI, el Palacio de Santoña _ España, es un gran desconocido para gran parte de los habitantes y turistas de Madrid. Se encuentra en la esquina de las calles Huertas y Príncipe de la capital española.
Su aspecto exterior muestra trazas típicas de los palacios madrileños del siglo XVIII, con composiciones simétricas con perspectiva horizontal, combinando ladrillo con cantería, sobre todo en la portada principal labrada en granito.
Fue adquirido por los Duques de Santoña en el siglo XIX, que lo adaptaron a los gustos de la época, con una decoración exótica con influencias orientales, conservados hasta la actualidad. En 1933 el Palacio fue vendido a la Cámara de Comercio e Industria de Madrid, su actual propietaria y de la cual es sede hasta la actualidad.
La escalera de honor
El primero de los ilustres habitantes que ha tenido el inmueble fue Muley Xeque, el príncipe heredero de Marruecos, que pasó aquí gran parte de su exilio a principios del siglo XVII. Con el pasar de los años, el Palacio se convertía en reflejo del devenir social.
Ángel protegiendo la virtud, obra de Carlo Nícoli.
El arquitecto del palacio Santoña fue José de Churriguera, pero tras su muerte en 1725, para la reforma del palacio recién adquirido se vio forzado a buscar un nuevo arquitecto. Resultó elegido Pedro de Ribera, continuador del estilo barroco de los Churriguera. Obra suya fue la portada de la calle Huertas, labrada en granito, ejemplo genuino del estilo de Ribera.
El sentido teatral y ornamentado de Churriguera, fue criticado por los puristas, pero se convirtió en un estilo popular, y se difundió por España, México y otras capitales latinoamericanas. Churrigueresco fue -en sus inicios- un término acuñado con sentido despectivo por los neoclacisistas, molestos por el desmembramiento formal, la profusión ornamental y la extravagancia académica de Churriguera, que llevó el dinamismo del barroco a sus extremos formales en España.
ángel renacentista escribiente y hojarasca de la barandilla
Pedro de Ribera (1681-1742), fue discípulo de José Benito de Churriguera (creador del estilo churrigueresco). Siguiendo la estela de su maestro, llevó a su pleno desarrollo los principios del «Barroco exaltado», hasta el punto de ser considerado uno de los arquitectos más relevantes del Barroco final en España.
Salón de Baile
Supo introducir Ribera en su lenguaje arquitectónico novedosos elementos que singularizan su estilo. Entre ellos se pueden citar los baquetones en sección asimétrica y más salientes que los utilizados hasta su época, que enmarcan frecuentemente la puerta del edificio.
Detalle del Salón de Baile
Esta joya escondida en Las Letras, declarada Bien de Interés Cultural en 1995, pertenece a la Cámara de Comercio de Madrid, que lo alquila para eventos empresariales, premios y rodajes.
La escalera de honor es de los más espectacular. De tipo imperial, con tres tramos. Toda ella realizada en mármol de Carrara. La balaustrada y las esculturas que adornan la escalera pertenecen al artista italiano Carlo Nícoli. Las esculturas son copias de temas clásicos existentes en los museos italianos: la Diosa Fortuna (cuyo original se encuentra en los Museos Vaticanos), la Amazona (copia del Museo Capitolino de Roma) o Minerva (también de los Museos Vaticanos).
Ya un diseño original del propio Nícoli es la escultura que preside la entrada a la planta noble y que se titula "El Ángel que defiende la virtud". Un león despierto, vigilante, nos recibe a la derecha. Su pareja en el otro lado es un león durmiente. Pequeños ángeles y escudos de los Duques adornan la balaustrada de mármol.
El Salón Pompeyano, que fué decorada por el pintor catalán, Francisco Pla (destacó como decorador de teatros) con grutescos y rombos en los que representaba a personajes muy conocidos del arte o literatura italiana: Petrarca, Dante, Brunelleschi, Rafael o Miguel Ángel. Con cerámica de Capodimonte en medio. En el centro de esta pequeña, pero decoradísima sala, encontramos un velador de estilo imperio. Es muy del siglo XIX buscar una decoración recargada y, a la vez, de estilos eclécticos.
Hay que recordar también que todas las salas, excepto el comedor de gala, tienen ventanas al exterior y están muy bien iluminadas. Este salón presenta una forma alargada con cuatro balcones que dan a la calle Huertas. Hoy en día se le tiende a llamar Salón Oriental, sin especificar nacionalidad, porque en realidad hay mucha mezcla oriental en los motivos decorativos.
Techo representando Hermes y Afrodita en el Boudoir
Notable espacio de la ciudad, con enorme valor tanto por su arquitectura y las artes decorativas que pueblan sus interiores, como por la atmosfera y espíritu que dejaron sus ilustres moradores. El Palacio de Santoña constituye un trozo de la vida y de la historia de Madrid.
"La belle ferronière" obra de Leonardo da Vinci, fue realizada en el año 1490 y con unas dimensiones de 62 x 44 cm. Actualmente se encuentra en el Museo de Louvre, en París _ Francia.
La belle ferronière es el título con que se denomina a un Retrato del Renacimiento: hoy en el Museo del Louvre, posiblemente de la misma modelo que otro en el Museo de Cracovia, ambos atribuidos al pintor italiano Leonardo da Vinci.
Tanto el autor como la identidad de la modelo están muy discutidos hoy día. Generalmente se considera obra de Leonardo, aunque algunos críticos prefieren considerar que se trata de una pintura de su discípulo Boltraffio. Sin embargo, la pose de la muchacha, su expresión a un tiempo misteriosa y melancólica, el suavísimo modelado de las facciones a través de la luz, hacen pensar en la experta mano de Leonardo más que en Boltraffio, que no era un gran artista, pese a imitar el estilo de su maestro.La identidad de la muchacha es también un problema.
La obra fue realizada durante los años de la estancia en Milán del artista, y refleja el intenso estudio de óptica de aquel período, evidente en el bellísimo detalle de la reverberación del vestido rojo en la mejilla del enigmático rostro. El modelado de las carnaciones se consigue gracias al juego de luces y sombras.
Esta hermosa mujer parece estar en la flor de la juventud. Tiene un listón en la frente al igual que La dama del armiño, y porta un peinado similar a esta última; su pelo es liso y cubre las orejas y la parte lateral de la cara, aunque el análisis de la obra a través de rayos X ha permitido comprobar que el pelo quedaba más arriba, de forma que se veía la parte inferior de la oreja izquierda de la retratada.
La Belle Ferronière” fue una de las amantes del rey Francisco I de Francia. Era una burguesa de París, y recibiría su nombre de la profesión de su marido, ferronnier (ferretero, persona que comercia con hierro). Lleva una joya que consistía en una cinta o cadena que rodea la cabeza, inmovilizando el cabello, y que se cierra sobre la frente con un camafeo o una piedra preciosa. Este adorno se puso de moda entre las mujeres de Francia e Italia del siglo XVI, usándose para ocultar lesiones sifilíticas.
Leonardo da Vinci no solía firmar sus cuadros, como buena parte de sus coetáneos del Renacimiento. Por eso son frecuentes las discusiones sobre la autoría completa de algunas obras en un tiempo en que se trabajaba mucho de manera colectiva en los talleres de los grandes creadores. Los autores no firmaban sus obras, así que el nudo podría ser la representación del autor. La palabra “nudo” significaba en italiano “vincolo”, que es una palabra parecida a “Vinci” que es el pueblo donde nació Leonardo y en "La belle ferronière" también se observa en sus nudos de su vestido rojo. Fue restaurado por última vez en 2015.
Bibliografía : "Leonardo", Los grandes genios del arte, n.º 17, Eileen Romano
La Villa della Petraia se encuentra en una excepcional situación, pues se encuentra en la colina de Castello en Florencia _ Italia. Forma parte del conjunto monumental denominado “Villas de los Médici”, que ostenta la consideración de Patrimonio de la Humanidad desde el año 2013, ya que fueron lugares pertenecientes a la importante y poderosa familia Médici, mecenas de ilustres y famosos artistas del Renacimiento.
Esta villa es una de las más bellas por muchos motivos, además de su hermosa construcción, sus salas, decoraciones, obras de arte y sus jardines, hay que añadir en especial sus vistas panorámicas más impresionantes de Florencia. Convirtiéndose en todo un formidable balcón natural sobre esta localidad.
Villa della Petraia fue adquirida por Cosimo I de Médici, para su hijo el Cardenal Ferdinando, en el siglo XVI. Quién acometió grandes reformas en el edificio convirtiéndolo en un auténtico palacio y creando unos fastuosos jardines.
Esta obra completa quedó plamasda en el dibujo de Giusto Utens en 1599. Posteriormente en el tiempo, Villa Petraia fue decorada y completada con auténticas y diferentes obras de arte, tanto frescos, como pinturas, esculturas y un largo etc. Por último, la última familia en ocuparla fue la casa real de Saboya, quién la donó al Estado Italiano en el año 1919.
De este bello edificio o palacio que compone la villa, destacamos los siguientes lugares de más interés:
El Patio Central es sin duda uno de los lugares más bellos de la villa .Este patio cubierto está decorado con ricos frescos de importantes artistas, entre ellos, “La Gesta de Godofredo en la toma de Jerusalén” de Cosimo Daddi en 1590. Cuenta también con una increible lámpara central de amatista
A principios del siglo XVII los pintores florentinos todavía ocupaban una posición predominante en el campo de la decoración mural. Ya desde el siglo XIV, este género, relacionado con el tema de la representación sagrada y las convenciones de la pintura de historia, los había llevado a sobresalir en ese arte.
Bernardino Poccetti (1548-1612) fue quien decoró la decoración de la villa La Petraia con la Historia de los Médicis, un patio interior con murales magníficamente conservados. Pintor y decorador italiano del Manierismo. Debido a su formación primitiva como decorador de fachadas y grutescos, nunca perdió su interés por el valor ornamental de las formas.
Bernardino Poccetti (1548-1612)
Siempre intentó la conciliación de la verdad y la elegancia, conservando la complicación en el dibujo propia del Manierismo. Esto le distingue de sus compañeros contramaniera , que intentaron un grado mayor de naturalismo en sus pinturas. Siempre fue fiel en el fondo a los principios del Manierismo, y aunque incluyó detalles naturalistas en su trabajo, siempre fueron ajenos a la esencia de su estilo.
Bernardino Poccetti, trabajó durante la primera década del siglo XVII jugó un papel predominante en la pintura mural. Su participación en la decoración de varias iglesias y de la logia del Hospital de los Inocentes hizo que se le reconociera su talento de narrador. En la villa medicea de Artimino y en el palacio Pitti, Poccetti asistido de su taller, realizó las decoraciones comisionadas por Fernando I de Médicis.
El Salón Rojo o de los Tapices es un bello salón comedor con una rica y lujosa decoración, en el que predomina el color rojo y sus bellos tapices flamencos del siglo XVII.
La Sala de la Esculturas contiene auténticas obras de arte, entre las que destaca la de Hércules y Anteo de Ammannati del año 1560, los Querubines de Bronce de Piero da Vinci, y dos estatuas de Gladiadores de Domenico Pieratti de 1635.
Gladiador obra de Domencio Pieratti del año 1635
Hércules y Anteo de Ammannati del año 1560
Actualmente las villas tienen varios destinos: algunas son verdaderos museos (La Petraia, Poggio a Caiano, Cerreto Guidi); otras están ocupadas por instituciones (como la de Castello, en la que el jardín es un museo, mientras la villa es el hogar de la Accademia della Crusca, (Academia de la lengua italiana); y otras más fueron vendidas o cedidas a particulares, que las mantienen para su uso privado o con la intención de tener un marco adecuado para celebrar eventos. Solamente 12 de las villas y dos jardines han sido incritos en la lista de la UNESCO.