lunes, 9 de noviembre de 2015

"Las SS. Rosario de Santa Cita", obra de Giacomo Serpotta


La compañía de las SS. Rosario de Santa Cita fue fundada en 1570, en Palermo _ Italia, después de la ruptura con la compañía del mismo nombre con sede en San Domenico, inaugurando su propio oratorio en 1686. La compañía, una de las más ricas y de mayor prestigio, jugando en un modelo de la oratoria como un lugar de reunión y de culto, con la función litúrgica, social y con el fuerte contraste entre el exterior arquitectónico muy modesto y el muy bien decorado realizado en su interior.




Se accede al sitio a través de un pequeño portal coronado por un escudo que a través de una escalera de mármol conduce a la terraza de baldosas, pasando por alto dos portales de mármol de finales del siglo XVI. Un gran antioratorio que ciertamente era un aula , el cual posee una espléndida procesión en el elegante estuco barroco inteligentemente elaborado e implementado por Giacomo Serpotta, encargado entre 1685 y 1690 de embellecer todo el entorno eclesiástico con una iconografía basada en los exempla de los misterios y las Virtudes.





Es casi seguro que se formó en Roma. En 1682 estaba sin duda en Palermo para la ejecución de la estatua ecuestre de Carlos II de Borbón. Empezó su larga carrera con el Oratorio de San Fidelio (1678), como decorado al estuco interior de los edificios sagrados en la ciudad de Palermo, que vivió bajo los Borbones un florecimiento de las artes, gracias a su mecenazgo. 





La personalidad de Serpotta se encontraba muy por encima de los - si bien importantes - artistas sicilianos de su tiempo. Sus relieves, que se expanden en las paredes de los edificios, tales como ramas sinuosas y sensuales, reflejan en parte los motivos de la escultura barroca, pero interpretándose de una manera muy personal y con un gusto inusual que era claramente un preludio al estilo rococó. Sus famosos «teatrini», los nichos reales de gran profundidad y alta complejidad, que representan un genio innovador que cambió la faz de la decoración del estuco en el período barroco innovador.




Son un ejemplo las del Oratorio del Santo Rosario en Santa Cita, donde los misterios se volvieron alegres y tristes, igual que la extraordinaria aunque mutilada por el robo y el vandalismo, del Oratorio de San Lorenzo, la concentración de la bóveda en la vida de los santos Francisco y Lorenzo.




La sala rectangular tiene las características de identificación del espacio litúrgico. En las paredes laterales hay un lazo de plástico refinado, que consiste en estatuas alegóricas y teatros, ilustrando misterios gozosos y dolorosos. Todo ello ubicado en el mostrador de los Misterios Gloriosos.

El episodio central del oratorio, realizado en el centro de la barra para el ábside, representa la histórica Batalla de Lepanto.





No hay comentarios:

Publicar un comentario