lunes, 5 de diciembre de 2016

Gala Placidia en Rávena

El Mausoleo de Gala Placidia en Rávena _ Italia, es un célebre enterramiento monumental de la hermana del emperador Honorio, Gala Placidia. Construido entre 425 y 430, es una de las ocho estructuras de Rávena inscritas en la lista del Patrimonio de la Humanidad en 1996. En forma de cruz griega (se habla de planta de cruz griega para las iglesias en las que nave y transepto tienen el mismo largo y se intersecan a la mitad de su longitud)


En cuanto a su apariencia exterior, presenta un modelo muy clásico: revestimiento de ladrillo y piedra unidos por argamasa y el edificio está articulado con arquillos ciegos al exterior, y un tejado cubierto de tegola plana vertiendo a 2 o 4 aguas. Sus grandes novedades se ven en el interior y en la forma de la planta. 


Aelia Gala Placidia, pues tal era su nombre completo, vino al mundo en la eterna Roma, en el año 392 D.C. Era hija del emperador Teodosio I, uno de los grandes emperadores hispanos junto a Adriano y Trajano, y de su segunda esposa, Gala, de quien heredó el nombre. Lo cierto es que quedó huérfana muy pronto, ya que su madre falleció a resultas de un parto en 394, y un año más tarde lo hacía su padre, Teodosio. 


A pesar de todas las innovaciones y modernizaciones que el Imperio Romano trajo consigo, las mujeres no gozaron jamás de auténtica libertad personal. Si bien aquellas pertenecientes a la nobleza pudieron disponer de cierta libertad de movimientos (algo que no puede decirse de las plebeyas), ésta fue más simbólica que real, y siempre estuvo supeditada a las decisiones de sus padres, maridos, hermanos e hijos. Sin embargo, unas pocas tuvieron oportunidad de ejercer su influencia sobre los hombres que las rodearon y, si bien no pudieron ejercer el poder por ellas mismas, sí tuvieron en sus manos el destino de Roma, Gala Placidia era una de ellas. hija, hermana, esposa y madre de emperadores, y también, reina de los visigodo.


A Gala Placidia le debemos algunas de las más importantes iglesias de la cristiandad: desde la restauración de la Basílica de San Pablo Extramuros, y la finalización de San Juan de Letrán, ambas en Roma, a la expansión de la Iglesia del Santo Sepulcro de Jerusalén. Sin embargo, si por algo recordamos hoy a Gala Placidia, es por el mausoleo que lleva su nombre en Rávena.



En el mausoleo fue enterrado Constancio III a su muerte en 421; la propia Gala Placidia sería enterrada también, aunque al parecer sus restos se quemaron accidentalmente en 1577. Y, finalmente, Valentiniano III recibió también sepultura en el mausoleo. Así, Gala Placidia descansó en compañía de los hombres que marcaron su vida, a excepción de Ataúlfo, quien posiblemente fue su único y verdadero amor. 


Este pequeño edificio de planta de cruz griega con una nave ligeramente más larga, con cúpula sobre pechinas en el centro y bóvedas de cañón en los brazos, donde su tramo central sobresale en altura y tiene una bóveda vaída, es una de las construcciones más notables del siglo V.



Su robusta distribución de masas es subrayada por los arcos ciegos y bandas lombardas, y unas cornisas clásicas subrayan los frontones levantados sobre los brazos, primer intento de enriquecimiento de los muros con medios arquitectónicos, toda la construcción es en ladrillo dentro de la tradición del grupo Tréveris-San Simpliciano. Su planta cruciforme deja adivinar la llamada “teoría de los orígenes orientales del arte cristiano en Occidente”. 


En el interior las paredes estaban revestidas de mármol, y las partes altas de mosaicos, con un color azul intenso. De esta manera, lo que visto desde el exterior parece una pequeña construcción, cuando se contempla desde el interior, se convierte en un espacio espiritual. Si su exterior es sencillo, hecho de volúmenes cúbicos y de ladrillo, el interior esconde un espacio hecho de superficies curvas, cuatro bóvedas de cañón y una cúpula central recubiertas de mosaicos azulados. El brillo y la intensidad cromática de los mosaicos, los hace adecuados para la representación de escenas y símbolos sagrados. Las bóvedas están llenas de estrellas geometrizadas, y todo está enmarcado por guirnaldas de viña, coronas de flores y cintas geométricas.













No hay comentarios:

Publicar un comentario