"El hombre desesperado", obra de Gustave Courbet, realizado entre 1843 y 1845, con unas dimensiones de 45 x 54cm, en la Colección privada.
Este cuadro es un autorretrato del pintor francés Gustave Courbet. Un retrato del artista en su juventud en el que mira directamente al espectador con una expresión de ansiedad e impaciencia que casi se contagia a quien lo contempla.
En el autorretrato como hombre desesperado lo que más destaca de la imagen son los ojos que, desorbitados, miran fijamente al espectador y que junto a una de sus manos agarrándose con fuerza el pelo nos muestran la desesperación del personaje que parece querer empezar a gritar pero que todavía no lo ha hecho.
Durante toda su carrera artística Courbet demostró gran habilidad haciendo retratos y autorretratos especialmente en la primera etapa de su obra. Pintó a sus parientes y amigos cercanos en numerosas ocasiones, así como autorretratos en diferentes posturas y actitudes.
Self Portrait, 1847 Museé d`Orsay, Paris |
Sin embargo, con veinte años llega a París para matricularse en la Facultad de Derecho, pero muy pronto el joven se desvía de esta dirección y prefiere acudir a los talleres de Steuben y de Suisse. Copia a los maestros del Louvre tales como Rembrandt, Hals, Rubens, Caravaggio o Ticiano y en la "galería española" de Luis Felipe, descubre a Velázquez y a Zurbarán.
Pa Kanten, by Courbet, 1844, The National of Art A&D Norway |
La nariz dilatada y el codo de la mano que tiene levantada apuntando hacia el espectador dan sensación de proximidad del artista a la persona que tiene enfrentada -el espectador- lo que se refuerza con la iluminación de la obra que acentúa estos apéndices y que parecen “agredir” a quién se coloque enfrente, al tiempo que le sirve para dar mayor profundidad psicológica a su rostro.
Self Portrait with dog, 1842, Museé Pontarlier |
La concepción del autorretrato es en cierta medida romántica, aunque le viene de su admiración y conocimiento de Rembrandt. El artista en el centro del cuadro exaltando su ego y su genio creador. En este caso abusa en cierta medida de la teatralidad resultando en este caso una pose y expresión un tanto artificiales.
Self Portrait with dog, 1842, Museé Petit- Palais, Paris |
El pintor Gustave Courbet (1819-1877) fue el maestro del realismo. Para él, autorretratarse era como escribir una autobiografía. Se pintó muchas veces y en actitudes muy distintas. Con ellos quería mostrar al público su estado de ánimo en los diferentes momentos pero no se hizo el habitual autorretrato posando para ello, sino que se incluyó en sus obras con sus actitudes cotidianas.
El hombre herido, 1844-1854, Museo d´Orsay |
Courbet no sólo se creía el más apuesto y seductor de los humanos, poseedor de un bellísimo e irresistible perfil asirio, sino también un artista capaz, desde la desinhibida exaltación de la vulgaridad y pureza de sus orígenes campesinos, de iluminar nuevas formas de verdad y belleza para acabar con las tendencias obsoletas de París. Su técnica libre y audaz incluye el gusto por los empastes de pintura, a menudo aplicados con el cuchillo o la paleta sobre la tela, que logran sorprendentes efectos de profundidad.
Bibliografía : El libro "El Arte y Sus Creadores" Coubert, volumen 34