miércoles, 25 de febrero de 2015

Un rincón de Dresde muy hermoso



Entre las atracciones turísticas de Dresde _ Alemania, no sólo figura la Frauenkirche, la Seper Oper o sus magníficos museos y palacios. Existe una edifico muy particular, una lechería que destaca en la lista de los lugares más pintorescos de la ciudad.

Esta antigua lechería que data de 1891 está completamente decorada con 250 metros cuadrados de azulejos de colores pintados a mano. Los azulejos que representan la historia de la producción de la leche y la hacen merecedora del nombre "la lechería más bonita del mundo". En ella se puede comprar gran variedad de productos lácteos y degustar un buen vaso de leche fresca.



Lechería Paul Gustav Pfund, en Dresde _ Alemania


La lechería más hermosa del mundo es la de los hermanos Pfund. Muros. "Cielos y suelos están cubiertos por completo de azulejos". Siento una adoración por los mosaicos y pienso que puede considerarse como una forma extraña de arte. Al igual que la pintura, el arte del mosaico es un arte realizado en dos dimensiones. Y como la pintura, también es un arte que permite obras de grandes tamaños. 


Detalle del interior 


Sin embargo, la diferencia de materiales utilizados y sus colores hacen que los resultados sean fundamentalmente distintos. Los pequeños trozos de piedra utilizados en los mosaicos, a diferencia del trazo continuo de la pintura, transmiten una sensación más primitiva, más artesanal y más rica en matices en gran parte debido, curiosamente, a sus pequeñas imperfecciones. 


Los azulejos representan
 la historia de la producción


Destaca el Libro de los Récords Guiness, en su edición de 1998. Fundado en 1892 por iniciativa de Paul Gustav Pfund, el negocio, ubicado en el Nr. 79 de la calle Bautzner, está profusamente decorado al estilo neorenacentista, con imágenes de ángeles, animales y flores. Desde hace más de una década viene conquistando a expertos y turistas por igual.



Decorado al estilo neorenacentista


Los azulejos representan la historia de la producción que devastó la ciudad de Dresde. Y también logró superar el período del socialismo germano oriental. En 1972, el negocio fue estatizado. Hubo planes de reemplazar los ornamentos murales por paneles de plástico pero, afortunadamente, no llegaron a materializarse.


Detalle de gran belleza  


Con la reunificación de Alemania, el negocio cayó en una especie de sueño de la Bella Durmiente hasta que, finalmente, fue devuelto a un bisnieto del fundador. Tras la refundación de la lechería de los Hermanos Pfund, el local fue recuperando paulatinamente su antiguo esplendor. La mayoría de los azulejos pudieron ser restaurados y sólo fue necesario reemplazar un 5%.



Detalle de los azulejos cerca del techo


El local volvió a abrir al público en 1995. Actualmente se ofrecen allí 120 tipos de quesos y leche. Además, los clientes pueden adquirir souvenirs como réplicas de los azulejos. En el piso superior de la tienda se ha habilitado un restaurante, que también disfruta de gran popularidad entre los turistas.



Pequeñas obras de arte recubren por entero los muros del local








lunes, 9 de febrero de 2015

El edificio llamado Historische Kaufhaus

En pleno centro de la ciudad de Friburgo _ Alemania y junto a la plaza de la Catedral, se encuentra un curioso y llamativo edificio de color rojo conocido como Historische Kaufhaus o Almacenes Históricos. Dotado de un diseño arquitectónico impresionante, su planta baja está adornada por cuatro arcos orientados hacia la Catedral de San Nicolás, y en sus extremos podemos contemplar dos pequeñas torres de estilo gótico tardío.



Edificio de color rojo conocido
  como Historische Kaufhaus  


En sus paredes se encuentran los escudos heráldicos de Maximiliano I, de Carlos V, de Fernando I de Habsburgo y de Felipe el Hermoso, hechos por Hans Sixt von Staufen entre los años 1520 y 1531.


Obra del arquitecto Lienhardt Müller.



La Casa de los Comerciantes fue construida en el siglo XIV para que sirviese como oficina de aduanas, además de para gestionar y controlar las transacciones comerciales, importaciones y exportaciones en la ciudad. Los primeros registros históricos en los que se menciona datan del año 1378, aunque no fue hasta 1520 que tomó su aspecto actual y su diseño se atribuye principalmente al arquitecto Lienhardt Müller. En el año 1550 se le añade a la estructura principal el balcón del piso superior, trabajo realizado por el constructor Jörg Sorger.


Detalle del Balcón 


A lo largo de su dilatada historia ha sido reformado y remodelado en varias ocasiones, e incluso en alguna ocasión se tuvo que reconstruir parcialmente en 1744 debido a los daños sufridos durante la guerra. El salón principal del interior es el llamado Salón Imperial o Salón del Emperador, en honor no a Guillermo I, y está decorado con varios retratos, entre los que podemos distinguir a María Teresa de Habsburgo, a Francisco II o a Isabel de Parma.


El emperador Maximiliano I


El edificio que más destaca es el Almacén Histórico (Historisches Kaufhaus), una pintoresca construcción de color rojo que se encuentra frente a un lateral de la catedral.Lo más destacable del Almacén Histórico es por supuesto su característica fachada roja, a los lados hay dos estilizadas cúpulas y en el centro hay cinco ventanas entre las que se encuentran las estatuas del emperador Maximiliano I, el rey Felipe el Hermoso, el emperador Carlos V y su hermano Fernando I. 


El escudos heráldicos de Maximiliano I
Obra de 
Hans Sixt von Staufen  


Actualmente se utilizan algunas de sus cuatro salas históricas para celebrar eventos importantes relacionados con Friburgo. Pese a que la mayor parte del tiempo ha sido empleado como casa de aduanas y gestión comercial, entre los años 1947 y 1951 el edificio acogió la sede del Parlamento del Estado Federal de Baden. He aquí algunos detalles del edificio que me tiene fascinada :
























lunes, 2 de febrero de 2015

Enrique Orce Mármol



Enrique Orce Mármol (Sevilla, 12 de octubre de 1885- Sevilla, 25 de julio de 1952) ceramista, pintor y profesor de dibujo sevillano de la primera mitad del siglo XX. El estudio más importante realizado sobre la vida y la obra de este importante ceramista sevillano lo constituye la tesis doctoral leída en la Facultad de Bellas Artes de Sevilla el 27 de Septiembre de 1994, por su nieto, el licenciado en Bellas Artes y ceramista Alfonso Carlos Orce Villar, con el título de “Enrique Orce: El auge de la cerámica sevillana”.


Enrique Orce Mármol


Enrique Orce Mármol, en su taller trabajando


Su padre, de profesión escultor, enfocado al estucado de edificios, entendiéndose el término como una profesión especializada y cualificada en aquella época en la recuperación de antiguos edificios, fue quien le introdujo el gusto por las Artes. Estudió en el desaparecido colegio salesiano de San Benito, en la calle Calatrava, cercano a su domicilio.


Detalle de los azulejos de Plaza de España, Sevilla


No obstante, sus primeras lecciones artísticas las recibe de Gonzalo Bilbao, Virgilio Mattoni, José Gestoso y José Tova Villalva en la sección de Bellas Artes de la escuela Superior de Artes e Industrias y Bellas Artes, en la que ingresó en 1897, con doce años, donde permanece hasta 1909 al menos, según cita Cascales, aunque existen pruebas de haber obtenido premios en su participación en la Exposición Nacional de Artes Decorativas e Industrias Artísticas en el curso 1912/1913, con obras en cerámica. De todo el profesorado, D. José Tova Villalva fue el que más le influyó para que se decantara por esta rama de expresión artística.



Obra de Enrique Orce Mármol


A partir de 1917 se abre en su vida un periodo a caballo entre Sevilla y Talavera, que duraría hasta 1920. José Cascales fija en este año su entrada en la Fábrica de Cerámica de Ramos Rejano, y que desde esta colocación realizó varios viajes de estudio a los alfares de Talavera de la Reina, Valencia, Manises, Castellón y Segovia. Posteriormente, fundó su propia fábrica en la Cuesta de las Herrerías junto con Alfonso de Santos, llamada Nuestra Señora del Pilar.



Detalle de Plaza de España_ Sevilla 

A principios de 1920 Orce regresa definitivamente a Sevilla, retomando su labor en Ramos Rejano, en esta ocasión como Director Artístico, asumiendo los postulados del Segundo Regionalismo, movimiento de claro carácter neobarroco, en contraposición con el Primer Regionalismo, de carácter neomudéjar, que se dio por amortizado en 1917 en el VII Congreso Nacional de Arquitectos celebrado en Sevilla. Coincide este periodo con la gran demanda de trabajo por la preparación y desarrollo de la Exposición Iberoamericana de Sevilla de 1929.


Plaza de España _ Sevilla 


Tuvo una extensa obra, con innovaciones personales y una técnica exigente. Sus realizaciones incorporan toda la pureza de la pintura al rasgo singular de la cerámica, siendo uno de los primeros en utilizar la técnica del aguarrás en la cerámica, ejecutando en esta década de 1930 diversas escenas costumbristas de estilo hiperrealista, a las que aplicó su técnica del “plumeado”. Plasmó también su arte en óleos y en acuarelas.



Los bancos de cerámica
obra del
 ceramista Juan Ruiz de Luna


Los bancos de cerámica que circundan la plaza están dedicados a cada una de las provincias españolas, en cuyo frontal se representa un hecho histórico o un monumento representativo de la provincia, rematando el banco, el escudo de la capital, y en el suelo el mapa de la provincia con sus poblaciones más importantes.

En el banco dedicado a la provincia de Toledo, se representa la conquista de Toledo por Alfonso VI, y está firmado por el ceramista Juan Ruiz de Luna, nacido en Noez (Toledo)


Detalle del Punte de la Plaza de España_ Sevilla 



Una vez cerrado el taller de Tova Villalva, Orce se volcaría en su taller propio de debajo de su casa, en el barrio de Triana.

Al final de la década de 1930, desarrolló además su faceta como escultor, realizando entre otras obras el Nazareno de Paradas, en 1938, y la Virgen de María Auxiliadora sedente para los Salesianos de Triana, en 1944.

Su última obra importante fue el retablo cerámico de la Virgen de la Soledad, en la fachada del antiguo convento de San Buenaventura, una obra bendecida en abril de 1952, pocos meses antes de su fallecimiento. En esta ocasión Orce combinó con maestría su faceta de pintor ceramista con la de escultor, resultando así uno de los mejores retablos colocado por una Hermandad sevillana en la calle.